Subiendo la cuesta del parque, el paseante encuentra un amplio espacio verde aún muy desnudo de arbolado. Pero si tiene la suerte de acudir un día tranquilo, un paisaje sonoro le invade: el silencio y las notas de los trinos de los pájaros que recorren el parque.
El paseante sigue subiendo la cuesta del Parque disfrutando del concierto de las aves pero, de repente, el paisaje sonoro cambia radicalmente: el rumor de un griterío le sorprende.
Sube a lo alto de la cuesta y allí está... El mercadillo de los martes en ebullición. Desde lo alto del auditorio abierto del parque (por cierto, parece que el superequipo de limpieza del alcalde ha querido respetar el grafiti), se oyen las voces: "¡A lo que quieras! ¡A lo que quieras! ¡A lo que quieras!". Una impulsiva vendedora rompe las leyes del mercado y anuncia su disposición a que sea el comprador el que ponga el precio. El paseante baja y se acerca para mezclarse entre el gentío. El brillo de la fruta a mediodía. "¡Pintalabios pa la crisis!" "¡Pintalabios pa la crisis! ¡A doh euroh! ¡A doh euroh!".
No te conocía en tus paseos. Quizás poralguno nos veamos algún día.
ResponderEliminarQuizás algunos, tuyos mios, sean complementarios.
Desde luego a este del mercadillo lo complementan muy bien mis dos series de fotos dedidacadas a estos trabajadores que puedes enlazar en 'Em mi barrio. Alcorcón'.
http://share.ovi.com/flash/slideshow.aspx?feed=manuhermon.Enelmercadillo&sort=1
http://share.ovi.com/flash/slideshow.aspx?feed=manuhermon.Losmartesmercad&sort=1
PD. allí hay mas de mil fotos de trabajadores de alcorcón trabajando.
¡Gracias! Enhorabuena por tu trabajo. Como ves, tu blog ya estaba enlazado aquí.
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